En el camino de la existencia siempre encontramos problemas difíciles de resolver, como por ejemplo atravesar el agua de una cascada sin que te derrumbe. Entonces tenes que dejar actuar a la imaginación creadora.
Pero existen problemas en esta vida en los que tenemos que escoger entre un camino y otro. Problemas cotidianos como una decisión empresarial, un rompimiento afectivo, un encuentro social, cada una de estas pequeñas decisiones que estamos tomando a cada minuto de nuestra existencia puede significar elegir entre la vida y la muerte.
Cuando sales de casa por la mañana para ir al trabajo podes escoger entre un transporte que te deje sano y salvo en la puerta de tu trabajo u otro que chocara y matara a todos sus ocupantes; esto es un ejemplo radical de cómo una simple decisión puede afectar a una persona por el resto de su vida.